sábado, 13 de abril de 2013

UNA CUCHARA SOPERA COMO SOLUCIÓN A NUESTROS PROBLEMAS.-



No, no voy a dar un curso de cocina, eso se lo dejo a otras personas mucho más expertas que un servidor…
Yo sólo me limito a compartir contigo, amigo lector una  sencilla reflexión:

Imagínate por unos minutos que tienes mucha, pero que mucha hambre…
Imagínate que te ponen una buena cacerola con la comida de “cuchara” que más te gusta (por ejemplo un buen cocido, o unas buenas lentejas, etc.).
Imagina ahora la forma que tienes para saciar tu hambre:
Te doy a elegir tres opciones:
·      La primera con una cucharilla de café.
·      La segunda cogiendo la cacerola y zás… a la boca toda entera.
·      La tercera con una cuchara sopera.
¿Qué pasaría en cada una de las opciones?
Si usas la cucharilla de café, te desesperarías y, además,  tardarías en saciar el hambre.
Si decides la segunda opción, es decir coger la cacerola, posiblemente te caería todo por la cara con lo que te quedarías con hambre y sin comida…
La solución es bien sencilla: Usar la cuchara sopera porque es la medida justa para comer bien, sin agobiarse, sin desesperarse y además saciaríamos nuestra hambre…
Y ¿por qué he escrito  todo esto?
Muy sencillo: Porque la vida y sobre todo los problemas o dificultades que nos trae la propia vida, puede provocar en nosotros esta  situación que he expuesto anteriormente y como solución tenemos, de nuevo, las tres opciones:
O usamos la cucharilla de café, es decir no damos solución exacta al problema exacto y nos sentimos fracasados, decepcionados…
O nos echamos la cacerola encima, es decir nos agobiamos, nos estresamos, nos frustramos…
O usamos la cuchara sopera, es decir, ponemos todas nuestras fuerzas en el momento presente, concreto y real con las reales y concretas soluciones que tenemos a nuestro alcance, es decir, como diría un tal Jesús de Nazaret: “No os agobiéis por el mañana pues el mañana traerá su propio agobio… A cada día le basta su afán”.
Es decir, que ante las adversidades de la vida, no cabe ni poner más ni poner menos de lo que podamos hacer en cada preciso instante, porque es en ese preciso instante en el que podemos resolver el conflicto (si está en nuestras manos) o pasar de su solución (si no está en nuestras manos). Será postura sabia, pues,  usar “la cuchara sopera”,  es decir, hacer todo y sólo lo que podemos y debemos hacer en el “Aquí y Ahora”.
Para que la vida no se te atragante, ya sabes, usa una cuchara sopera ante los problemas. Ah y no olvides que si estás deprimido un motivo puede ser porque vives en el pasado, si estás estresado, es porque vives en el futuro y si estás en paz es porque vives en el presente…

Recibe un abrazo de Paz.

Dandy

2 comentarios:

Ángel Dandy dijo...

Espero que te ayude esta sencilla reflexión para quitarnos un poco ese stress y esa ansiedad que tanto daño hacen a nuestra mente y a nuestro cuerpo... Saludos...

Unknown dijo...

Gracias...es complicado encontrar la cuchara sopera, a veces está en más recondito rincón del cajón de los cubiertos. La única razón por la q nunca a de dejar de buscarla es porque sabes que algún día la encontrarás y podrás gozartela con esa olla llena de paz.